“Es Necesario estar 1000% convencidos”
Más allá de “la moda” del emprendimiento, el ICI Guido Pierattini reflexiona sobre la importancia de perseverar y crear alianzas para lograr proyectos exitosos. Revisa cómo lo consiguió…
Guido Pierattini es un ICI emprendedor y desde 2007 ha sido profesor del DII en Taller de Proyecto y de Ingeniería Industrial.
Sobre los “emprendedores ICI” señala que pese a estar siempre cercano al Departamento tiene poco contacto con otros compañeros que hayan creado su propio negocio.
“Creo que nos falta juntarnos y conocernos más y sobre el ecosistema de emprendimiento creo que se está hablando mucho e invirtiendo bastante pero también hay mucho de moda en torno al tema. Creo que faltan más lugares serios con resultados con concretos como Imagine Business Lab, liderados por personas que son empresarios. Los ex alumnos del DII podríamos hacer mucho más al respecto”, reflexiona.
La historia de Guido en la autogestión comenzó cuando junto a su equipo se dio cuenta que las compañías invierten muchos recursos, financieros y de tiempo, en entrenamiento con muy pocos resultados. “Las personas hoy no resisten más de 20 minutos concentrados en un curso tradicional, clase frontal, aprenden poco, se desmotivan, no tienen continuidad y el lunes vuelven a trabajar haciendo lo mismo que hacían antes del curso”, sostiene.
Agrega que en un país tan largo como Chile se hace muy costoso entrenar en regiones y es ahí donde juega un rol clave la tecnología. Destaca que hoy todas las personas tienen smartphones “con la misma capacidad del computador que puso al primer hombre en la luna, pero no se ocupan para entrenar”.
“Nosotros buscamos ayudar a las empresas, también colegios y Universidades, a que puedan ocupar videos online en sus procesos de enseñanza y hacer más eficiente el tiempo en las instancias presenciales a través de actividades prácticas, sobre todo en contextos no rutinarios”, explica.
Su empresa se llama FLIP (www.flip.tools) y ofrece una plataforma web y móvil enfocada sólo en el uso de videos para el aprendizaje que permite usar cualquier video de Youtube o Vimeo y tener analytics de todo lo que los alumnos realizan y cuánto aprenden.
FLIP es la primera plataforma diseñada para Flipped Learning de Latinoamérica, por eso su nombre, y ha sido desarrollada con fondos de CORFO. El equipo de desarrollo lo lidera su socio y también ICI del DII Miguel Angel Cornejo.
“Hoy FLIP tiene más de 1.200 usuarios activos. Además hemos formado un equipo audiovisual propio enfocado exclusivamente en la producción de videos educativos y para entrenamiento, el cual ha producido más de 200 videos a la fecha”, señala Guido.
La empresa cuenta también con un área de consultoría que diseña e implementa los proyectos con sus clientes.
Hoy trabajan en 8 empresas de distintas industrias: minería, construcción, consultoría y sector público, entre otras; tres Colegios y dos Universidades con muy buenos resultados, ya que según afirma, han logrado hacer más eficiente el proceso de entrenamiento al generar ahorros de costos, ampliando la cobertura en todo Chile y con más aprendizaje a partir del uso de videos online y la implementación de metodologías prácticas.
¿Cuáles fueron las principales dificultades que enfrentaste? ¿Cómo las superaste?
En mi experiencia lo más difícil fue partir. Encontrar un proyecto del que esté realmente convencido como este y tener el primer cliente. Al principio no tienes mucho que mostrar y la primera venta es una verdadera hazaña, luego de eso todo se hace menos difícil. Tener paciencia y perseverancia también me parece que es fundamental porque después de trabajar un año muy duro se empezaron a ver los resultados.
Otro factor que me parece relevante es buscar alianzas y ayuda en los lugares adecuados. En mi caso el apoyo de la Incubadora de Microsoft Imagine Business Lab ha sido clave para poder desarrollar mi negocio. El apoyo de CORFO a través de financiamiento también fue muy relevante en su momento.
Por último ha sido clave tener el equipo adecuado. Afortunadamente hemos elegido muy bien a las personas que hoy trabajan con nosotros y eso ha sido fundamental.
¿Qué opinas como emprendedor/empresario respecto a lo que la Facultad y el Departamento te entregó como herramientas para poder desempeñarte como tal? ¿Dónde crees que es necesario mejorar?
Me parece que el DII en su momento fue muy pionero en estos temas que ahora están de moda, pero que el Departamento hace 25 años o más viene trabajando. En este sentido me parece que el trabajo que ha realizado el profesor Carlos Vignolo ha sido fundamental. En mi época las principales herramientas que después me han servido las tuve en cursos que dictaba él. Otra experiencia que me sirvió mucho fue ser parte del CEIN, aprendí mucho ese año y mirando para atrás le asigno mucho valor.
No obstante, creo que el DII se ha ido quedando. Me parece que es necesario dar más facilidades formales a los alumnos para que puedan desarrollar sus proyectos y aplicar en ellos los conceptos que la carrera formalmente tiene. Creo que aún la carrera, como en todas las Universidades, está demasiado enfocada en formar administradores de empresas y poco en formar creadores de empresas.
¿Qué consejos le entregarías a los ICIs que están pensando en iniciar un nuevo negocio?
Estar 1000% convencidos del proyecto que tienen, que les guste lo que hacen y ojalá que tengan experiencia y conozcan la industria donde están partiendo su negocio. Todo esto es fundamental para poder mantenerse motivado ante las dificultades que irán surgiendo.
Estar consciente que es un camino largo y duro, que no emprendan solos, que busquen socios, aliados, ayuda. Idealmente que los socios tengan distintas competencias que se potencien. En nuestro caso mis dos socios tienen competencias muy diferentes a las mías y eso ha sido muy importante para poder desarrollar nuestra empresa: Miguel Angel Cornejo ha trabajado más de 10 años desarrollando Proyectos TIC´s y mi otro socio es mi hermano Giovanni quién es Psicólogo Educacional con muchos años trabajando en el mundo de la educación
Enfocarse en hacer proyectos que generen mucho valor en cada cliente, aunque no sean muchos al principio. Eso permite aprender, mejorar la oferta de valor y empezar a generar una identidad en el mercado.
